lunes, 10 de septiembre de 2012

Barrio Norte

Hace poco que me mudé. Soy del interior de Argentina y me vine a estudia diseño de interiores por Palermo. La verdad que no me gusta cocinar, me encanta la ciudad y pasear, pero a la hora de comer siempre pido. Es una de las cosas que me encanta de Buenos Aires. Está lleno de delivery en Barrio Norte, por donde vivo. Muchos estudiantes y gente joven vive por aquí. Los deliverys florecen por todo el barrio. Se ve que hay mucha gente que comparte lo mismo que yo. Que no le gusta cocinar. El problema no es solamente cocinar. Es que después también hay que lavar y la cocina se va ensuciando. Claro, porque no es sólo que se ensucia un poco y se limpia. Se engrasa, todo se va engrasando y luego hay que limpiar y fregar más. Con la ropa ya es demasiado, aunque por suerte existe el lavarropas, ese glorioso invento del siglo pasado que comparte el podio con el aire acondicionado y con Internet. Ah, y también se puede pedir delivery por internet. Todavía no a través del aire acondicionado ni del lavarropas, pero ya estoy segura de que en cualquier momento se va a poder. Al menos conectar el lavarropas y operarlo a través de Internet. Yo ya he visto eso en la televisión. Un lavarropas que se puede operar a través de internet. No sé si será un prototipo o ya se estará vendiendo en algunos lugares. Es para casas inteligentes, esas que tienen tableros digitales desde los cuales se puede controlar todo y asumo que ya habrá posibilidad de hacerlo por Internet. El problema es si se mete un hacker y te comienza a apagar y prender el lavarropas, por ejemplo. Las luces. O la bañadera! Eso sería lo peor, que te comiencen a tirar agua fría mientras te estás bañando. Porque que te borre los archivos es una cosa, pero la angina o el resfrío es otra. En fin, quién sabe qué nos deparará el futuro.